El presidente ejecutivo de Japdeva, Francisco Jiménez, recalcó durante su visita a Diario Extra que la concesión de los muelles de Limón es impostergable para lograr el desarrollo real de la provincia. A nuestro director y subdirector, William Gómez (izq.) y Mario Ugalde (der.), respectivamente, explicó los beneficios de este proceso. Los acompaña el periodista de Japdeva, Israel Oconitrillo.

Convertirse en el tercer Presidente Ejecutivo de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva), en la administración Arias y tener el gran reto de poner en práctica el proyecto de modernización de los puertos del Caribe, no intimidó a Francisco Jiménez, quien semanas atrás dejó la capital y se trasladó a Limón para dirigir Japdeva.

Jiménez visitó elmperiódico para conversar con nuestro director y subdirector, William Gómez y Mario Ugalde, respectivamente, sobre los beneficios que la concesión de los muelles de Moín y Limón traerá al país y en especial a los limonenses.

¿Cómo han estado los primeros contactos con el sindicato?
Han sido muy cordiales, he venido siguiendo la tónica de negociación y apertura que han tenido en el pasado con don Álvaro Rodríguez.

Me tocó finiquitar la suscripción del adéndum a la Convención Colectiva, para modificar la jornada laboral que la pasamos de seis a ocho horas y en donde se hace el reconocimiento de horas extras ocasionales y no fijas.

Además, se incorporó en la Convención Colectiva un asunto importantísimo que es el modelo del reconocimiento por productividad por encima del 75% y hasta el 90%, es un elemento que siempre está en discusión, ya sea del sindicato, la administración o de la empresa privada.

Este tema ha sido bien estructurado, aquí el que trabaja más y produce más, no solo como funcionario individual sino como colectivo en su área de trabajo, tiene la oportunidad de tener mejores ingresos.

Hay grupos que son muy concientes de su impacto en el proceso de producción y atención de los muelles y servicios, pero hay otros que no tienen tanta claridad.

-¿De dónde salen los fondos para este pago de productividad?
-Proviene de los ingresos brutos que genere la institución y estos vendrán en la medida que se esté para arriba del 75%. Si hay aumento en la productividad hay un distribución de estos recursos, algo que me parece muy sano.

-¿Han hablado con los trabajadores del tema de concesión?
-El tema de la concesión se ha venido hablando, esta es una posición firme y definitiva de la administración, pero será una concesión con rostro humano, significa lograr que esta institución que se llama Japdeva y que es pilar del desarrollo no se va a debilitar, sino que tendrá un rol más proactivo en el desarrollo portuario, al asumir la labor de fiscalización.

El sindicato es conciente de esto, lo cual es impostergable, obviamente hay posiciones encontradas y de primera mano se oponen a un proceso de concesión que no tengan las condiciones de rostro humano y que garantice la productividad del puerto y que se van a mejorar los ingresos.

-¿Cuáles son los temas que deben tratarse con cuidado?
-Hay elementos muy sutiles, recuérdese que la población de Japdeva es muy adulta, no hubo un cambio generacional, usted encuentra ahí gente con muchísima experiencia, ahí se encuentran ingenieros graduados en Alemania, en Bélgica, en Europa, España en Estados Unidos, que conocen el tema portuario.

Esto permite que los mandos medios sean bien capacitados, pero ¿cómo articulamos esos mandos medios con el resto de la población, para sacar el máximo provecho?, ahí es donde hemos tenido rezagos importantes, aquí tenemos una población con 24 años en promedio de laborar en la institución.

-¿Cuáles eran sus conocimientos de Japdeva antes de llegar a este puesto?
Mi vinculación con Japdeva de manera directa no es grande, sí tengo la oportunidad de tener muchos amigos y en especial mi mejor amigo, que es mi padre, quien fue miembro fundador de la primera Junta Directiva de Japdeva, cuando los miembros eran ad honórem, mi papá es ingeniero civil, en aquellas épocas trabaja construyendo cañería.

Junto con un grupo de empresarios de la zona me he mantenido en el sector transportes y dándole seguimiento a Japdeva como un instrumento clave en la provincia.

Después del Zurquí todo es Japdeva. Ahí no hay MOPT, no hay vivienda, tecnología, ahí es Japdeva que por definición tiene que articular a todas las instancias, pero de una u otra manera nos hemos concentrado mucho en el tema portuario que es la actividad de Limón.

Esto no quiere decir que la producción de banano, piña, ahora las exportaciones o el manejo de logística sean determinantes, pero como actividad comercial sigue siendo Japdeva el responsable de articular este puerto, que es el segundo puerto en movimiento de banano en el mundo y no somos el primero porque Ecuador tiene mayores hectáreas sembradas, pero al ritmo de crecimiento del 5% y el 6% anual que llevamos, entonces vamos a ser el principal puerto.

Y esto no depende de Japdeva, depende del resto de inversores, de gente que está en la producción. Japdeva es solo un instrumento de la administración, de los ciudadanos y de los trabajadores para facilitar el desarrollo. Con la estructura actual pasarán muchos años para ver resultados y seguiremos viendo los mismos resultados de ahora.

-¿Qué participación e influencia tienen los sindicatos en las decisiones que se toman en Japdeva?
-Por Convención Colectiva, Sintrajap es la instancia de representación de los trabajadores, en la que se establecen una serie de comisiones bipartitas que sirven para hacer una “fiscalización” de reclutamiento y selección de personal, para que sea transparente y que el trabajador no vea diezmados sus intereses.

De ahí a coadministrar es donde se pierde la frontera, mientras nos mantengamos ahí estamos haciendo una buena labor constructiva, pero el problema es que a través de los años y las prácticas se va generando costumbre.

-El gobierno ha dicho abiertamente que la concesión de los muelles de Japdeva va. ¿Es usted la persona llamada a ejecutar ese proceso?
-Es muy importante que los costarricenses sepan que lo que se hará es concesionar los puertos, porque la privatización no está en la voluntad política del gobierno. Con este modelo el Estado no pierde la propiedad de los bienes, lo que hace es traer un tercero que haga la inversión y a través de los canones se distribuye las rentabilidades.

Lo más importante es que los puertos son indispensables para la economía nacional, para la importación y exportación, si nos preocupamos por mejorar la exportación, por mejorar la calidad, por tener materia prima con mejores países pues tenemos que tener también adecuados instrumentos para la importación de la materia prima.

Las acciones que se han tomado en estos dos años ha sido preparar los estudios, las organizaciones, las consultorías, las necesidades, las sensibilizaciones hacia eso.

A mi me corresponde, por razones de tiempo, concretar ese proceso, poner sobre la mesa cual es el modelo de concesión, cual es la inversión en infraestructura, en servicios, como es el plan de indemnización de los trabajadores y negociar ese plan.

Es un proceso de negociación porque yo quiero el mayor monto de indemnización para cada uno de los funcionarios. Que aquellos que no se incorporarán a la actividad portuaria por razones de edad o de gusto, se puedan dedicar a otras actividades comerciales que tanta falta hacen en la provincia.

Esa indemnización bien entendida y administrada, va a generar muchos pequeños y medianos empresarios en Limón alrededor de la actividad marítimo portuaria, por la cantidad de cruceros que llegan cada año a esa provincia.

Si hablamos que Limón necesita más fuentes de empleo entonces generemos más fuentes de empleo. Las fuentes de empleo no se generan pagando más hoy a los trabajadores, se generarán dándoles mayores capacidades de esfuerzo, mayor infraestructura.

¿Por qué la concesión es el único instrumento para transformar los muelles, el Estado no puede hacerlo solo?
La concesión es el instrumento, se requieren $600 millones que el Estado costarricense no puede sacar, yo no puedo competir con la salud o la seguridad.

Aunque el presidente y la Ministra de Transportes, anunciaron la aprobación del préstamo de $850 millones del BID, la infraestructura portuaria no entra ahí, porque a lo largo y ancho de toda América la infraestructura portuaria ha sido concesión. Ahí están Panamá, Guatemala, Colombia casos interesantísimos en el Caribe.

¿Cómo está actualmente la operación de los muelles, ya están al 100% o aún falta personal?
Falta personal, porque en este cambio lo que hicimos fue pasar de seis a ocho horas en lugar de cuatro turnos de seis horas, ahora solo esperamos la aprobación para completar las 121 plazas que ya están debidamente identificadas para ir al área operativa y de producción en el puerto.

¿Qué se va a lograr con esas 121 plazas?
Que los turnos queden completos, lo cual llevará al puerto a operar al 100%, debería llevar al puerto a tener la capacidad instalada en personas para que el puerto esté al 100%, pero ahora hay que ver el tema de productividad y rendimiento, que es un asunto de administración.

Como Presidente de Japdeva, ¿qué áreas cree usted que sea necesario reforzar para que Limón deje de ser una de las provincias más pobres del país?
Definitivamente aumentar las fuentes de empleo. La pobreza solo se puede enfrentar con dos cosas, con estudio y empleo. Además, hay que mejorar la calidad del inglés, hay muchas oportunidades de las actividades que se generan en inglés, necesitamos inglés de verdad, aquel que requiere todas aquellas unidades de servicio o de exportación de servicio, o sea aquel que se llama inglés neutro, mediante el cual usted pueda entender a un europeo o un norteamericano y no tiene el acento.

En la parte portuaria, Limón necesita acelerar y Japdeva tiene una gran responsabilidad acá, que es orientada a la capacitación portuaria. Tenemos no solo que dedicarle recursos sino lograr en este año y medio la cantidad de cursos para que el personal de Limón pueda participar y conocer de la actividad portuaria porque vamos a tener una demanda de servicios vamos a tener que ir a traer gente de otros países.

• “Japdeva no se va a debilitar, con la concesión tendrá un rol más importante en el desarrollo portuario”.

• “Las fuentes de empleo no se generan pagando más, se generarán dándole a la población mayores capacidades de esfuerzo e infraestructura”.

Fuente: Diario Extra, Costa Rica